Los morados supieron neutralizar al Barcelona hasta los últimos minutos del partido. Rashford, ya con el 0-1 en el marcador, sentenció el encuentro

No pudo ser. El Deportivo Guadalajara se quedó muy cerca de dar la campanada en esta edición de la Copa del Rey ante el FC Barcelona, actual campeón del torneo. Los hombres de Pere Martí, quien vivió el encuentro desde la grada, plantearon un choque muy incómodo al cuadro azulgrana, que no pudo adelantarse en el marcador hasta el minuto 76 de partido. Las tuvo el Dépor para haber empatado la contienda, pero Ter Stegen y, ya en el 90′, Rashford disiparon las dudas. Un partido para estar muy orgulloso del equipo alcarreño.

La tarde no comenzó del todo bien. El partido tuvo que retrasarse media hora debido a un problema con las gradas supletorias que el club morado había instalado para este encuentro. Finalmente, el choque pudo arrancar sin incidentes a las 21:30.

Como era de esperar, Pere Martí apostó por un once titular cargado de jugadores con menos minutos en las piernas. La gran novedad la vimos en defensa. Agus Moreno comenzó el partido como refuerzo en banda izquierda, estableciendo un doble lateral junto a Julio Martínez, que se desempeñó gran parte del encuentro como tercer central. Todo ello con el claro objetivo de frenar a una de las grandes novedades en el once culé: Lamine Yamal. Flick alineó a varios de sus hombres más importantes: Eric, Lamine, De Jong o Rashford. Ter Stegen volvía a disputar minutos con el Barcelona tras recuperarse de su lesión al inicio de campaña, una vez que Joan García ya se ha establecido como el portero titular de los culés.

El plan de partido fue el que todos apuntaban en la previa. El Barcelona fue quien llevó la batuta del juego durante todo el encuentro, haciendo gala de la calidad de sus futbolistas. Aunque, realmente, los de Flick tuvieron muchas dificultades para generar ocasiones ante el repliegue del Dépor en su campo. Los once futbolistas morados salieron con la consigna clara de hacer el partido lo más largo posible, dejando pocos espacios por dentro y permitiendo al Barcelona jugar de lado a lado. Pero hasta ahí. De hecho, la primera ocasión del encuentro la tuvo el propio Dépor. En el minuto 5, Ter Stegen tuvo que intervenir ante un disparo lejano de Manu Ramírez, el cual detuvo en la línea de gol.

Lamine Yamal estuvo muy incómodo durante todo el encuentro. En prácticamente todas las ocasiones que tocaba el balón, el joven futbolista del Barcelona tenía hasta tres futbolistas morados encima suya. Lo intentó entonces a través del pase, pero tampoco funcionaba. Eric, Christensen, Rashford y Fermín lo intentaron a través de disparos desde media distancia, pero se toparon con Dani Vicente. El portero suplente del Dépor, titular en la Copa del Rey, fue una de las figuras más destacadas del encuentro. Sus intervenciones sirvieron para mantener vivo al Dépor tanto en la primera parte como, sobre todo, en la segunda.

En el segundo tiempo, más de lo mismo

Apenas cambió el rumbo del encuentro tras el paso por vestuarios. Flick introdujo a Cubarsí por Bernal y movió a Casadó al centro del campo. Algo que permitió a Eric, un futbolista con buen pie, amenazar más con el centro desde el lateral diestro.

Dos minutos de la segunda parte habían pasado cuando el Barcelona gozó de su mejor ocasión en todo el partido. Rashford desaprovechó un gran pase de Bardghji al interior del área, topándose con los pies de un Dani Vicente estelar. El Dépor seguía en el partido. Y lo siguió haciendo cinco minutos después. Rashford volvió a tener una ocasión muy similar a la anteriormente narrada. Esta vez, un envío al área de Eric acabó en las botas del inglés, quien volvió a encontrarse con los pies del guardameta del Deportivo Guadalajara.

El Dépor, bien plantado en su campo, tuvo algún tímido acercamiento al área culé tratando de aprovechar las transiciones en pocos toques. En una de las pocas veces que lo logró, Christensen estuvo muy atento para desbaratar un posible remate a bocajarro de Cañizo tras una gran pared entre Julio Martínez y Toño Calvo.

El paso del tiempo metía, cada vez más, el miedo en los jugadores del Barcelona. A partir del 60′, ambos entrenadores comenzaron a introducir a sus mejores piezas. El propio Toño Calvo, Gallardo y Salifo entraron por parte del Dépor, mientras que el Barcelona amenazaba con el ingreso al terreno de juego de jugadores de talla mundial como Balde.

Christensen alivió el nerviosismo culé

Los visitantes encerraban al Dépor un metro más según avanzaba el reloj en el marcador. Los envíos al área y las internadas se sucedían con más frecuencia. Los jugadores del Dépor, pese a estar defendiendo ferozmente en su propio área, comenzaban a llegar tarde a todas las acciones debido a la exigencia física. Y de pronto, llegó el jarro de agua fría. Un centro cerrado de De Jong al área terminó con un remate de Christensen, quien acabó superando el muro impuesto por Dani Vicente después de que el balón rebotara en Julio Martínez.

El Barcelona se ponía por delante tras 76 minutos sin poder hacerlo. Para ello, Flick tuvo que meter aun más leña al fuego, dando entrada a Koundé y Pedri. El Dépor veía como sus opciones se esfumaban, aunque todavía quedaba tiempo para volver a igualar la contienda. Salifo, apenas dos minutos después del gol, tuvo el empate en sus botas. El guineano, tras acomodarse el balón con un gran control y una buena arrancada, puso a prueba a Ter Stegen con un misil desde fuera del área donde el alemán tuvo que esforzarse al máximo. Cañizo, pocos minutos después, volvió a intentarlo con un remate de cabeza que acabó manso en las manos del propio Ter Stegen. Hasta ahí llegó la reacción del Dépor.

Con el equipo volcado en el empate, comenzaron a aparecer los huecos a la espalda para que Lamine, aún en el terreno de juego, Rashford y compañía, pudieran matar el partido a la contra. Y así sucedió. El inglés acabó sentenciando el encuentro tras un pase largo de Lamine Yamal, en el que al ex del United tan solo le bastó un amago con el cuerpo para dejar fuera de la jugada a Dani Vicente y resolver a puerta vacía.

Un gol que aun así no enmudeció a la grada del Pedro Escartín, quien se mantuvo firme hasta los minutos posteriores al final del encuentro. Con este resultado, el Dépor termina así su mágica andadura en la Copa del Rey. Una edición que recordará para siempre el aficionado del Deportivo Guadalajara. Nadie sabe cuándo volverá a suceder algo así.

Ficha técnica

CD Guadalajara: Dani Vicente; Cera (Neskes, 83′), Ablanque, Casado, Julio Martínez, Agus Moreno (Gallardo, 62′); Rojo (Tavares, 72′), Mayo; Manu Ramírez (Toño Calvo, 62′), Borja Díaz (Salifo, 62′), Cañizo

FC Barcelona: Ter Stegen; Casadó (Koundé, 75′), Eric García, Christensen (Gerard Martín, 86′), Jofre (Balde, 63′); De Jong, Bernal (Cubarsí, 46′); Bardghji (Pedri, 75′), Lamine Yamal, Fermín; Rashford

Árbitro: César Soto Grado

Goles: 0-1 Christensen (76′); 0-2 Rashford (90′)

Tarjetas: Bernal (30′); Manu Ramírez (32′); Mayo (54′); Ablanque (71′)