Tras lograr su octava pole esta temporada, el «93» logra una nueva conquista esta vez en Balaton Park, un circuito «antitrazada» totalmente nuevo para él, pero donde supo moverse como pez en el agua y dominarlo a la perfección, sin ofrecer apenas oportunidades a ninguno de sus perseguidores, que esta vez resultaron ser Marco Bezzecchi y Pedro Acosta.

Tensión máxima en territorio húngaro
Carrera loca la disputada este pasado domingo, en la que hubo caídas, encontronazos y dramatismo, pero el ganador resultó ser el mismo de siempre. Marc Márquez, a pesar de haber tenido un pequeño choque en las primeras curvas del gran premio junto al italiano Bezzecchi que le obligaron a perder varias plazas, supo soportar la presión y gestionó la carrera de manera formidable, como nos suele tener acostumbrados a estas alturas de campeonato, para llevarse nuevamente el oro. El italiano de Aprilia, logró liderar durante muchas vueltas y poner en problemas a Márquez, pero finalmente fue superado por el de Ducati y por el de KTM Pedro Acosta, quien a pesar de salir desde la séptima plaza, picando mucha piedra y achicando mucha agua, cosechó una muy meritoria y trabajada segunda plaza.

Cabe destacar la actuación del actual campeón del mundo y piloto de Aprilia Jorge Martín, quien a pesar de no subirse al podio, alcanzó una cuarta plaza con gran sabor a victoria. Después de mucho tiempo inactivo, poco a poco vemos a Martinator volver a disfrutar estando subido de la moto y siendo el piloto atrevido y valiente que siempre ha sido. Veremos cómo sigue evolucionando, pero si todo avanza como hasta ahora, todo apunta a que dentro de no mucho le volveremos a ver luchando por posiciones más altas e incluso por más mundiales. A pesar de todo esto, el de San Sebastián de los Reyes se mantiene sereno y no permite que la euforia le domine: «Tengo un largo camino por delante, pero el potencial es muy alto», afirmaba el piloto una vez finalizada la carrera.

Balaton Park se caracteriza principalmente por ser un circuito pequeño, a la par que peligroso. La carrera larga de domingo estuvo repleta de caídas, siete pilotos se fueron al suelo durante su transcurso, entre ellos el de Gresini y segundo en la clasificación Álex Márquez. El susto lo dió Enea Bastianini, que perdió el control de su moto entre una de las chicanes del circuito durante el primer tramo de la carrera y quedó cruzado en plena trazada. Milagrosamente, todos los pilotos le pudieron esquivar y el italiano logró salir intacto del crítico incidente.

Posible bola de título en Misano
«El tro de Cervera» se marcha de Hungría con una ventaja de 175 puntos sobre su hermano Álex, lo que significa que si en el próximo gran premio que se celebrará en Catalunya, la ganancia aumenta a los 185 puntos, podría proclamarse campeón del mundo por novena vez en Misano, la casa de Valentino Rossi. A pesar de esto, Marc ha mencionado querer bola de título más adelante, ya que si la obtiene en territorio italiano, significará que el rendimiento de Álex en Montmeló no ha sido del todo bueno, y él quiere lo mejor para su hermano.
El Circuit de Barcelona-Catalunya es uno de los trazados que el «93» tiene marcados en rojo en el calendario. Lo ha llegado a catalogar como un circuito tiralíneas, todo lo contrario a lo que mejor se le da a él, las pistas «antitrazadas» donde la improvisación es la clave. De todas formas, dentro de no mucho veremos el desenlace de este mundial. No sabemos ni cuándo ni dónde exactamente, pero el dueño cada vez está más claro. .




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