Tras varias temporadas en la sombra, la fábrica Japonesa sueña con recuperar a la que fue en el pasado su máxima figura Marc Márquez, con quien lograron 6 campeonatos del mundo en la categoría reina y junto a él anhelan volver a lo más alto en un futuro no muy lejano.

Objetivo: 2027
Pese a que todavía no esté pasando por un momento muy lúcido, Honda poco a poco va dando pasos en grande con tal de volver a ser competitivos. Esto se ha podido comprobar con los positivos resultados que ha estado brindando el piloto francés Johan Zarco, y en el ritmo cada vez más elevado que presenta el español Joan Mir aunque no con mucha fortuna a la hora de puntuar.
El contrato de Márquez con la marca de Borgo Panigale expira con el cierre del campeonato de 2026, así que durante este tiempo, los japoneses tratarán de seguir desarrollando de manera efectiva sus motos con el fin de traer de vuelta al «tro de Cervera» a la que durante muchos años fue su casa, si este decide seguir compitiendo. A pesar de que no es el principal objetivo de Honda en estos precisos momentos, su puerta siempre estará abierta al 8 veces campeón del mundo.
Alberto Puig, team manager del Honda HRC Castrol, fue el encargado de expresar su punto de vista desde Sachsenring sobre esta posible vuelta de Marc, noticia que ha sorprendido a todos los amantes del motociclismo y que sobre todo ha generado muchas expectativas entre ellos: “No estamos pensando en eso. Márquez pasó la mayor parte de su carrera en Honda y tuvo un éxito enorme. Cuando decidió irse, eligió su camino y ha demostrado ser el correcto porque está liderando el Mundial. Y nosotros estamos muy contentos por él”.

De las cenizas al podio
La marca del «Ala Dorada» es la única fábrica que puede presumir y con orgullo de ser con diferencia la más laureada de la historia, habiendo logrado innumerables logros junto a estrellas como Valentino Rossi, Nicky Hayden, Casey Stoner, Álex Crivillé y el gran Mick Doohan, considerado el mejor piloto de la marca hasta que fue sobrepasado por Marc Márquez, quien subió a la máxima categoría en 2013 y fue llegar y besar el santo. En su año como «rookie», conquistó su tercer mundial y con esto logró ser el piloto más joven en ganar un gran premio con tan solo 20 años y 63 días.
Todo se torció en Jérez 2020, donde una fatídica caída en la carrera le propició al que un día fue el galáctico de Honda una fea lesión en el brazo derecho que provocó, además de una clara disminución en su nivel en cuanto a rendimiento, la falta de competitividad en las motos de la marca. Pero la situación ya no es la que era hace 5 años. El «93» ha recuperado su mejor versión, y Honda poco a poco consigue ver luz al final del túnel pese a que todavía poseen mucho margen de mejora. Si se alinean los astros, en menos de dos años podríamos contemplar el retorno de Marc a la que todavía considera su casa.




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