El adiós de un capitán que marcó una era en La Constitución

El Yeclano Deportivo vive uno de los momentos más emotivos de los últimos años con la salida de Gabriel Clemente, uno de los jugadores más representativos y queridos por la afición. Tras cuatro temporadas defendiendo con pasión la camiseta azulgrana, el central yeclano pone punto y final a una etapa inolvidable en su carrera y en la historia reciente del club.

La marcha de Gabri supone mucho más que un simple movimiento en la plantilla. Tras la reciente salida de Adrián Hernández, el que fuera técnico y capitán del proyecto, ahora el club ve partir también a “el mejor marinero del barco”, como se podría definir en un símil marinero.

Cuatro temporadas de compromiso y corazón

Pocos jugadores han dejado tanta huella en tan poco tiempo como lo ha hecho Gabriel Clemente. Desde su llegada a Yecla, el central se ganó el respeto del vestuario, la confianza del cuerpo técnico y, sobre todo, el cariño de una afición que lo ha visto dejarse el alma en cada balón dividido, en cada despeje y en cada gesto fuera del campo.

Su rendimiento deportivo ha sido intachable: regularidad, contundencia y liderazgo. Pero lo que realmente ha convertido a Gabri en un símbolo del Yeclano ha sido su compromiso humano. Humilde, cercano, siempre disponible para los suyos. Ya fuera en La Constitución o compartiendo café en los Pirrikis, Gabri siempre ha sido un “buen chaval”, como bien lo define su entorno y el del club.

Un capitán con presencia dentro y fuera del campo

A pesar de no ser un habitual ante los micrófonos, el ‘4’ del Yeclano ha sabido comunicarse de la mejor forma posible: con el ejemplo. Su presencia silenciosa pero firme, sus sonrisas compartidas con los aficionados y las lágrimas sinceras en los momentos importantes lo convirtieron en un verdadero capitán. Un líder natural que no necesitaba brazaletes para demostrar su peso dentro del equipo.

Un adiós con sabor a agradecimiento y esperanza

La salida de Gabri no es solo una pérdida deportiva, sino también un momento que marca un cambio de ciclo en el Yeclano Deportivo. El club se despide de un referente, pero también celebra lo que ha sido su paso por la entidad. Porque no todos los futbolistas conectan así con una ciudad, y no todas las despedidas dejan una sensación tan agridulce.

Desde este medio, y desde la afición, solo podemos decir: gracias por todo, capitán. Por cada partido, por cada detalle, por cada vez que representaste nuestros colores con orgullo. Yecla siempre será tu casa, y tú siempre serás parte del Yeclano.

El futuro de Gabri, con la ilusión de nuevos horizontes

Ahora, Gabriel Clemente emprende un nuevo camino, con la firme intención de seguir creciendo personal y profesionalmente. Dondequiera que juegue, llevará con él el espíritu de lucha que mostró en cada jornada con el Yeclano.

A ti, Gabri, solo te deseamos una cosa: que seas como mínimo tan feliz como lo has sido en Yecla. Porque nosotros, sin duda, lo seremos contigo, allá donde vayas.