El partido termina con un abultado marcador 1-5 a favor de la selección nacional. Un encuentro donde han llevado la batuta durante los 90 minutos con grandes actuaciones como las de Esther y Athenea. La selección vuelve a España con la confianza para enfrentar a Inglaterra con la mejor de las actitudes.
La roja sale a por todas.
La seleccionadora española no ha querido quedarse corta con el once inicial y ha salido fuerte, con Cata Coll en portería y una defensa formada por Alexandri y Paredes como centrales y Ona Batlle y Olga Carmona en los laterales. El centro del campo lo dominan Alexia Putellas, Aitana Bonmatí y Patri Guijarro. Mientras que la delantera es cubierta en las bandas por Claudia Pina y Mariona, por último, la sorpresa de esta alineación es Esther, cubriendo la posición de nueve en la que habitualmente vemos a Salma.
Montse Tomé tiene claro que este partido se tiene que ganar, ya no solo para seguir dependiendo sólo de ellas mismas para mantener el liderato del grupo, sino para llegar al partido contra Inglaterra con la cabeza alta.
Esther parecía ser la clave.
La única sorpresa en este once era ella, que volvió a vestir la camiseta de la selección tras más de un año, hace apenas una convocatoria. Sin embargo, eso no quita que este tiempo sin ella, a la roja le ha costado cubrir la posición de 9.
Sus compañeras, a sabiendas de su olfato goleador, no han parado de buscarla en cada jugada prometedora, y tras 36 minutos de esos intentos, Mariona es la que le asiste con perfección para que Esther marque el primero.
Aunque Bélgica ha querido dejarse ver en los primeros 45 minutos, las españolas no lo han permitido y tras el gol no las han dejado respirar, consiguiendo irse al descanso con uno de ventaja.
El doblete habitual
En la segunda parte, una Bélgica que había ganado a Inglaterra en la anterior convocatoria, sigue siendo dominada por la España campeona del mundo, aunque la entrenadora belga ha intentado modificar el equipo con algunos cambios, sus jugadores siguen sin apenas darle trabajo a Cata.
Y la selección de Bélgica sigue sin reaccionar, cosa que aprovecha otra vez Esther González para marcar su segundo gol, un doblete al que nos tiene acostumbrados. La jugada nace en el centro del campo, como no, desde las botas de Patri Guijarro, que le da un pase largo a Athenea Del Castillo. La jugadora del Real Madrid controla la pelota como puede y, aunque tiene a la defensa belga sobre ella, consigue darle la asistencia a Esther para que marque el segundo.

Minutos después, la delantera sale cuando su entrenadora decide hacer doble cambio, por ella entra Salma Paralluelo. El segundo cambio es algo más especial, Lucía Corrales debuta con la selección absoluta teniendo oportunidades de ir a la Eurocopa de este verano, por ella sale Olga.
Lluvia de goles y cambios para prevenir.
A Athenea no le vale con una asistencia, así que, aprovechando que acaba de salir al campo y los minutos no le pesan, consigue meter no uno, sino dos goles. El primero viene de un error en salida de balón de Bélgica que la delantera aprovecha para subir al marcador el tercero. Ni un minuto después, vuelve al ataque, otro error de Bélgica, otro acierto de España, Athenea se planta frente a la portera rival y aunque el primer disparo no entra, ella encuentra el rechace y consigue su doblete y el cuarto de la selección.

En el 81 volvemos a ver cambio. Con este marcador tan abultado a favor, Montse decide dar descanso a dos de las jugadoras del campo que hace apenas unos días jugaron la final de la Champions. Patri y Mariona salen para dejar su lugar a Maite Zubieta y Alba Redondo, quien decide aprovechar los pocos minutos que la entrenadora le ha dado para marcar el quinto.
El partido termina con el marcador 1-5 con un gol de las belgas a balón parado en los últimos minutos del encuentro. Un partido, que una vez más, deja ver que el fantasma que las cubrió en los Juegos Olímpicos ha desaparecido y volvemos a ver a una selección española que defiende, crea y marca.



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