Son días fríos y tristes en la ciudad condal, no en el plano deportivo donde los culés atraviesan un gran momento de forma, liderando la liga, con la eliminatoria de Champions ligeramente favorable y a expensas de un partido de vuelta en semifinales de Copa que promete emoción y frenesí.
El motivo de esta penumbra viene por el repentino fallecimiento del doctor Carles Miñarro el pasado sábado en plena concentración antes de recibir a Osasuna en un partido que se terminó aplazando a causa de dicho motivo. Esta pérdida deja tocados a los futbolistas al perder una persona muy querida dentro del vestuario.
La victoria como mejor homenaje
Tal y como ha dicho Hansi Flick en rueda de prensa, los jugadores y el propio staff están conmocionados todavía, no hay que olvidar que Miñarro ha perdido la vida con apenas 40 años, en plena flor de la vida y además de forma totalmente inesperada y rápida.

Carles Miñarro habla con Hansi Flick en la banda tras el choque de Gavi contra el Alavés/ Diari Ara
Esto motiva a la plantilla de forma especial, pues según ha declarado el técnico alemán «Carles era una gran persona, es una gran pérdida queremos jugar y ganar por él» todo esto muestra el impacto y la huella que ha dejado en un equipo al que llegó hace 7 meses.
Al margen de todo el Barça está mostrando una madurez y una seguridad que llevaba mucho tiempo sin lucir en el Viejo Continente, donde llevaba más de un lustro sin infundir respeto a los gigantes del fútbol y gran parte de esa mejora está en el trabajo de Flick pero sobre todo en el teabajo físico y médico que hay detrás, solo hay que ver a futbolistas como Pedri, Rapinha o Lewandowski que han resucitado física y mentalmente.
A Montjuic sin complejos y con las lecciones aprendida
Más allá de todo el ruido que rodea al Barça, toca centrarse en el fútbol y en concreto en el rival que tiene en frente, como es este Benfica que ya ha dejado más que claro que puede poner en dificultades a los culés solo hay que ver el encuentro de la fase de grupos, que brindó un auténtico espectáculo ofensivo con 9 goles y tuvo como desenlace una agónica victoria del Barça. Respecto al encuentro de ida, los lisboetas volvieron a poner en aprietos al FC Barcelona que aguantó con 10 más de una hora, finalmente gracias a la fe de Rapinha, el criterio de Pedri y la exhibición de Szczesny bajo palos dieron al Barça una ligera ventaja.
En ambos partidos el Benfica ha demostrado un arrojo y una garra sorprendentes, añadiendo a eso una fuerte presión en campo contrario por parte del delantero y los medios más ofensivos, añadiendo a esta ecuación a futbolistas como Álvaro Carreras que ha sido capaz de secar a Lamine Yamal en ambos encuentros, y sobre todo en el de liguilla fue un incordio para la defensa visitante.

Otamendi y Di María calientan en la previa de un partido de Champions del Benfica/ La Voz
Sin embargo los lusos han enseñado también su lado negativo, pues el contar con una plantilla que mezcla futbolistas muy veteranos, como Otamendi y Di María , jugadores aún por hacer como Carreras o Antonio Silva y el resto de jugadores que están en plena madurez tienen poca experiencia en estas instancias europeas y esto se ha demostrado en estos precedentes, donde las áreas han castigado al Benfica.
En fase de grupos lograron algo impensable como fue golear al Barça, ganando en muchos momentos por 3-1 o 4-2, sin embargo los de Bruno Lage no supieron mantener a raya el caudal ofensivo de los culés que acabaron remontando el encuentro de forma épica sí, pero a partir de errores inconcebibles, como el fallo de marca en el gol de Eric García o el fallo de Trubin al sacar de puerta tan bajo, que permitió el gol de Rapinha de rebote, además del desorden defensivo previo al gol de la victoria culé.

Rapinha celebra el gol ante el Benfica mientras es abrazado por sus compañero/ El Guardián
En la ida de los octavos fue al contrario, pudo contener mucho mejor las acometidas blaugranas, dejando estériles a jugadores como Lewandowski o Lamine, aunque el fallo Antonio Silva permitió el tanto de Rapinha, lo que le faltó a las águilas fue contundencia arriba pese a estar con uno más casi todo el partido, fueron incapaces de embocar una sola ocasión bien es cierto que Szczesny hizo un recital bajo palos, pero un contexto tan favorable como el del pasado miércoles se presenta muy pocas veces
Entre el cruce en Da Luz y el de mañana, las águilas recibieron al Nacional, al que golearon 3-0 con un gol de Kochu de penalti, otro de Andouni y un autogol del rival en el descuento.
Jugadores a seguir
Rapinha: El brasileño es junto a Pedri el alma de este equipo, corre como un jabato, marca o asiste en todos los momentos importantes y está firmando cifras de Balón de Oro, una pesadillas para el Benfica al que le ha hecho 3 goles en 2 partidos.
Pavlidis: Ya le hizo un hat-trick al Barça lo que demuestra su contundencia y lo necesario que es para su equipo, su poca presencia en la ida se notó y seguro que Lage lo empleará como gran baza ofensiva, que ya ha generado 13 goles esta temporada.



Deja un comentario